La patronal apela al miedo al
paro como estrategia contra la huelga general convocada el 29 de marzo
"La
gente no quiere una huelga, sino un trabajo", ha dicho Arturo Fernández
para quien "no está claro que los españoles estén dispuestos a una
huelga". En un desayuno informativo, el vicepresidente de la patronal y
presidente de CEIM insta a los sindicatos a “modernizarse”.
El
vicepresidente primero de CEOE y presidente de CEIM, Arturo Fernández, ha criticado el paro general del 29 de marzo
convocado por los sindicatos y ha asegurado que "la gente no quiere una
huelga, sino un trabajo", a lo que ha añadido que el presidente de la
patronal, Juan Rosell, "está dispuesto a seguir discutiendo".
Durante su
intervención en el 'Forum Europa', ha dicho que "la huelga es innecesaria
y no es el momento de plantearla" porque muchas personas pasan por una
"situación muy crítica", lo que obliga a "arrimar el hombro y
ser optimistas".
Con todo,
Fernández cree que los sindicatos pueden desconvocar la huelga, más aún cuando
"no está claro que los españoles estén dispuestos a una huelga".
Asimismo, les instó a "modernizarse" y aseguró no ser enemigo de las
centrales sindicales. Por último, elogió la labor del Gobierno y dijo que
"los empresarios están encantados". "Llevamos 100 días y se está
cambiando todo, esto empieza a oler bien", añadió.
Rosell dice
que dentro de la CEOE será necesario hacer cambios "con más intensidad y
valentía"
Durante su
intervención en el 'Forum Europa' para presentar al presidente de CEIM , el
presidente de la CEOE, Juan Rosell, ha asegurado que hacía falta un
"giro importante" en el mercado laboral para frenar la destrucción de
empleo y ha confiado que la reforma laboral del Gobierno "sea el
adecuado", a lo que ha añadido que "si no, habrá tiempo de
adecuarlo".
Además,
defendió el resto de las reformas estructurales puestas en marcha por el
Gobierno y las comunidades autónomas, sin las que, en su opinión, "se
hunde el país". Así, dijo que "era imprescindible la estabilidad
presupuestaria, al igual que la reforma del sistema financiero, porque, como el
cuerpo humano, "sin la sangre no funciona".
Por último,
Rosell dijo que dentro de la CEOE será necesario hacer cambios "con más
intensidad y valentía". "Hay que hacer las cosas distintas porque
todo va más deprisa". "Estamos convencidos de hacerlo", indicó,
para añadir que hay mucho que hacer al respecto "en las próximas semanas y
meses".
También se
ha pronunciado en este sentido Arturo Fernández, al afirmar que la
patronal debe "reinventarse" para recuperar el "prestigio"
del empresariado. En su opinión, la CEOE debe llevar a cabo su propia reforma
para volver a “oír la voz del empresario y del autónomo”.
”El
inmovilismo se paga muy caro”, dijo el dirigente empresarial, quien agregó que
en la patronal “tenemos muy claro que lo que nos llevó al éxito en el pasado no
nos llevará al éxito en el futuro”. En este sentido, defendió que es necesario
que las patronales sean “organizaciones transparentes en su financiación, más
ágiles y más potentes”, con el “difícil reto” de recuperar “el diálogo y la
imagen de nuestras empresas”.
En cuanto a
las subvenciones que reciben tanto las organizaciones empresariales como las
sindicales, Fernández apuntó que el objetivo es que sean “independientes y
vivan de sus cuotas”. Asimismo, sostuvo que el dinero que reciben del Estado,
destinado a formación, es el que pagan las empresas a través de las
cotizaciones de sus empleados, por lo que “no son subvenciones, sino que nos
devuelven nuestro dinero”.
Articulo extraido de Nueva Tribuna.
Articulo extraido de Nueva Tribuna.
No hay comentarios:
Publicar un comentario